Vendedor de su vida a las drogas

Es un joven del centro de San Salvador, el cual día a día lucha contra su vicio de marihuana, una persona con sonrisa carismática, un carácter fuerte.

Por: Stanley Orellana

Todos lo conocen por su vida de drogadicto  pero eso no le quita que él sea una persona muy trabajadora, suda la camisa vendiendo, se mueve de un lugar a otro, en los buses, en el mercado, en todo lugar, su amabilidad engaña a sus clientes, ya que con una sonrisa su vos sensual y sus ojos color café vende muy rápido sus productos, aunque después de esa venta se valla a una esquina, agarre su encendedor y comienza a fumar marihuana

Así mismo, su madre era la mejor vendedora de la zona y esa herencia se la heredó a su único hijo, desde su infancia comenzó en los vicios de la maquinitas, lo mandaban a vender los diferentes productos, era listo ya que siempre le aumentaba cinco centavos de colón a su venta para que esa sea ganancia extra para ir a jugar en esos juegos.

Eran las cuatro de la tarde y él todavía en los juegos, su mamá llegaba a regañarlo y a sacarlo, diciéndole que eso era malo, que por gusto lo que trabajaba sí ahí iba a dejar todo el dinero, pasó el tiempo y sus consejos no fueron certeros, ya que el joven nunca los aceptó.

Además se escapaba de las clases para ir a tomar con los amigos, el cambio de moneda de colón al dólar le afecto, ya que muchas veces le daban dólares y el devolvía hasta con diez colones el vuelto, comenzó a perder.

De la misma manera el vicio fue creciendo poro a poco pero su habilidad nunca la perdió, su amabilidad fue muy notable y una gran ventaja en su trabajo.

Finalmente ahora en día pasa vendiendo frutas, verduras, dulces y otros productos, pero de la misma manera tiene el vicio el cual no lo puede dejar, lucha día a día pero su batalla esta pérdida ya que el doctor dijo que tenía cáncer en los pulmones.